No suele ser muy habitual presenciar la obra Egmont de Beethoven en comunión con la letra de Gotehe . Lo normal es que se escuche aislada la ejecución de su preciosa obertura. En esta ocasión, el maestro Ros Marbá, al frente de la excelente Orquesta Ciudad de Granada ha tenido a bien ofrecernos la obra con la teatralidad inherente que conlleva en la descripción de la vida del héroe conde Egmont. El maestro Ros Marbá fue desgranando cada una de las diez secciones que consta la obra, describiendo con lectura clara las marchas, las alegrías y los sufrimientos de un pueblo frente a su opresor. Beethoven expresó sus preocupaciones políticas a través de la exaltación del sacrificio heroico del conde Egmont condenado a muerte y a su vez, la soprano Carmen Solís encarnó a su mujer, Clara, a través de sus dos bellos líeder. La primera de ellas, “Die Trommel geruhret” (El tambor conmueve) fue un allegro a modo de marcha en la que la soprano pacense mostró el calor tibio de su timbre vocal y luego, en el segundo “Freudvoll und Leidvoll” (En la alegría y en la Pena) con un canto en una tesitura más alta, reflejó su la brillantez. Esta versión teatralizada, tiene también un narrador que va describiendo las vicisitudes de la historia y el encargado de ese relato recayó en Rafael Taibo, declamador de fraseo claro y sonoro, aunque tal vez algo tajante en la entonación o si se quiere una pizca falto de matiz. Una obra espléndida en la que se distinguieron no solo las cuerdas, sino también unas limpias trompetas, sobre todo en el brioso allegro final.